Traduce esta página web a tu idioma - Translate this website into your language - Traduire ce site dans votre langue - Tradurre questo sito nella tua lingua - Traduzir este site para o seu idioma - Transferre hoc website in lingua - Vertaal hierdie webwerf in jou taal - Übersetzen Sie diese Website in Ihre Sprache - Tradueix aquesta pàgina a la teva llengua -
English French German Spain Italian Dutch Russian Portuguese Japanese Korean Arabic Chinese Simplified
***** BENDICE NUESTRO MINISTERIO DE AYUDA ESPIRITUAL GRATUITA EN INTERNET Y TU VIDA SERA BENDECIDA.

NUESTROS SERVICIOS

*** BIENVENIDO/A A LA PAGINA WEB DE AYUDA ESPIRITUAL GRATIS POR INTERNET ***
¿De qué se trata?
Es un servicio de aconsejamiento espiritual. Usted puede contarnos su problema y nosotros le aconsejamos desde una perspectiva humano cristiana para que pueda solucionarlos. Su consulta se trata con absoluta reserva. Cientos de personas en todo el mundo nos han consultado y han agradecido la ayuda suministrada. Nuestra visión es de reino, esto quiere decir que nos gustaría que usted pueda asistir a nuestra iglesia, crecer espiritualmente y recibir grandes bendiciones de Dios, pero también nos alegra que usted pueda ser bendecida y desarrollarse en su vida, en su entorno social, en su ciudad y ser feliz.
Las áreas de consulta son muchísimas, usted puede consultarnos sobre relaciones familiares, sobre su vida existencial, su relación social, su trabajo, la vida espiritual, sobre el futuro del hombre según la Biblia, sobre problemas matrimoniales, vicios, drogadicción, soledad, etc.
Estamos dispuestos a aconsejarle espiritualmente, orar a Dios por su vida junto con otras personas, orientarle y asesorarle cristianamente, enviarle información de aliento para su vida existencial, mantener una amistad verdadera, y acompañarle en los momentos difíciles. Para que de esta manera usted pueda desarrollar todo su potencial a favor suyo y a favor de los demás.

BIBLIA: La esperanza del ministerio


La Biblia, Nuevo Testamento, 2da de Corintios Capítulo 5


La esperanza del ministerio


Porque sabemos que si nuestra casa terrenal, esta tienda temporal, se deshace, tenemos un edificio de arte de Dios, una casa no hecha de manos, eterna en los cielos.

Y por esto también gemimos, deseando ser revestidos de aquella nuestra habitación celestial;

pues así seremos hallados vestidos, y no desnudos.

Porque asimismo los que estamos en este tabernáculo gemimos con angustia; porque no quisiéramos ser desnudados, sino revestidos, para que lo mortal sea absorbido por la vida.

Mas el que nos hizo para esto mismo es Dios, quien nos ha dado las arras del Espíritu.

Así que vivimos confiados siempre, y sabiendo que entre tanto que estamos en el cuerpo, estamos ausentes del Señor

(porque por fe andamos, no por vista);

pero confiamos, y más quisiéramos estar ausentes del cuerpo, y presentes al Señor.

Por tanto procuramos también, o ausentes o presentes, serle agradables.

Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o sea malo.

Conociendo, pues, el temor del Señor, persuadimos a los hombres; pero a Dios le es manifiesto lo que somos; y espero que también lo sea a vuestras conciencias.

No nos recomendamos, pues, otra vez a vosotros, sino os damos ocasión de gloriaros por nosotros, para que tengáis con qué responder a los que se glorían en las apariencias y no en el corazón.

Porque si estamos locos, es para Dios; y si somos cuerdos, es para vosotros.



Porque el amor de Cristo nos constriñe, pensando esto: que si uno murió por todos, luego todos murieron;

y por todos murió, para que los que viven, ya no vivan para sí, sino para aquel que murió y resucitó por ellos.

De manera que nosotros de aquí en adelante a nadie conocemos según la carne; y aun si a Cristo conocimos según la carne, ya no lo conocemos así.

De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.

Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación;

que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de la reconciliación.

Así que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios.

Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.

No hay comentarios:

************** MENSAJES ANTERIORES **************

Si te somos de bendición, ofrenda a este ministerio de consejería y evangelístico,

Si te somos de bendición, ofrenda a este ministerio de consejería y evangelístico,
para que llevemos la palabra de salvación a todas las personas.

Hola Amigo/a!!! Bienvenido/a!!! soy AEG

Hola Amigo/a!!! Bienvenido/a!!! soy AEG
Estos libros te pueden ayudar

** LIBROS VIRTUALES, INTERACTIVOS PARA PC, GRATUITOS, NO IMPRESOS, DESCARGABLES DE INTERNET.

RECIBE NUESTROS MENSAJES POR EMAIL

RECIBE NUESTROS MENSAJES POR EMAIL
RECIBE NUESTROS MENSAJES POR EMAIL

************** SUSCRIBITE A NUESTROS MENSAJES DE ALIENTO SEMANAL **************

Ingresa tu dirección de email:

Delivered by FeedBurner

***** Ayúdanos a seguir adelante dejando algún comentario o adquiriendo nuestros libros virtuales. De esta manera, nos harás saber que te somos de bendición y que nuestro trabajo en el Señor no es en vano. Gracias. *****

*** ENVIA TU CONSULTA O PEDIDO DE ORACION, GRATUITO DE AYUDA ESPIRITUAL ***

Coméntanos tu situación

.

.

** INGRESA CON TU FAMILIA AL REINO DE LOS CIELOS A TRAVES DE ESTA ORACION: **

Haz esta oración y sé salvo y sano espiritualmente:

Repite con nosotros:

Padre y Dios mío, vengo a ti, no puedo más, estoy tan cansado/a, me siento mal, tengo mil problemas, te necesito, ayúdame por favor, creo en tí, aunque no te vea o no te sienta, perdóname por mis pecados, me arrepiento por estar lejos de ti, te pido que me perdones, a través de tu Hijo Jesucristo, lo recibo a él en mi corazón, entra Jesús en mi, tu eres mi salvador, hazme una nueva persona, lléname de tu Espíritu Santo, de tu Palabra, de tu bendición, cámbiame, mejora mi vida, mi familia, mi economía, por favor te lo pido, ten piedad de mi oh Dios, yo te doy gracias, te alabo y te bendigo, y te daré toda la gloria, la honra y la alabanza. Amén.


Ayúdanos con tu ofrenda de amor

Visitas en el día

religion y espiritualidad