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REFLEXIONES PARA VOS |
¡Cuánta necesidad de paz tenemos los seres humanos!
Hoy mi amiga Lidia, me envió esta hermosa imagen, sentí el deseo de compartirla con ustedes lectores de Reflexiones para vos y a la vez sentí tanta frescura y paz mirando esta imagen, en medio de la vorágine de la vida en la que todos estamos sumergidos inevitablemente.
Mirar ese hermoso mar, en medio de tantos problemas, situaciones que no podemos resolver, impotencias, deseos de hacer las cosas bien, con la desilusión de darnos cuenta que no somos perfectos y que de una u otra manera, somos propensos a equivocarnos; nos hace respirar hondo y descansar por un momento de tantas angustias.
Necesitamos tanto de la paz de Dios que sobrepasa todo entendimiento, como dice en la Biblia en Filipenses 4:7.
Cuando estamos metidos en los problemas que atravesamos, buscando las posibles soluciones, sin encontrar la respuesta perfecta para que todo vuelva a la normalidad muchas veces; nuestra mente termina agotándose, caemos en estrés, dolores de cabeza, jaquecas y una profunda tristeza.
Generalmente solos no podemos solucionar todo, por eso el Señor nos da la solución, en el Salmo 121:1-2:
"Alzaré mis ojos a los montes;
¿De dónde vendrá mi socorro?
Mi socorro viene de Jehová,
Que hizo los cielos y la tierra"
Levantando nuestros ojos hacia Jesús, cambiamos de perspectiva en los momentos de desconcierto y angustia, porque ya no miramos el problema, sino comenzamos a recordar que tenemos un Dios tan grande que todo lo puede.
La Biblia dice en Jeremías 32:27: "He aquí yo soy el Señor, el Dios de toda carne ¿Habrá algo imposible para mi?"
¿Qué contestaría usted a esa pregunta? ¿Tiene conciencia de que Dios todo lo puede? Si usted confía en Jesús ¿Será difícil para Dios solucionar su problema?
Piense por un momento, quien venció a la muerte, resucitando al tercer día ¿Verá como imposible su problema? No, esté completamente convencido de que poniendo toda su confianza en el Señor, verá la Gloria de Dios en su situación, en el momento que menos lo espere.
Muchas veces Dios actúa así, mientras estamos con toda nuestra atención en nuestro problema y angustiados, parece que desesperamos porque no ocurre nada, pero en cuanto la paz de Dios viene a nuestro corazón cuando oramos, nos distraemos por un momento y es ahí, justamente en ese momento, es cuando el Señor actúa a nuestro favor.
¿Que sentiría usted si su hijo dudara de recibir su ayuda? ¿No se desilusionaría? Dios también, Él espera toda nuestra confianza y nuestra oración de dependencia a su poder y a su amor.
Deje ahora mismo sus problemas a los pies de la cruz, donde Jesús dio su vida por usted y no olvide que al tercer día resucitó como lo había prometido, porque Dios siempre cumple lo que promete, en el tiempo perfecto, que solo Él conoce.
Reciba la paz de Dios en su corazón, respire hondo, confíe en Jesús.
Escuche esta hermosa canción.
Dios lo bendiga
Susana Goglián
"EL ME LEVANTARÁ"
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